Distinción Relativizar vs. No hacer nada

Llevo tiempo pensando en la diferencia de estas dos cosas: relativizar 
y no hacer nada. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Hay personas que confunden ambos términos, y para mi no tienen nada que ver. Lo esencial, desde mi punto de vista es desde dónde hacemos las cosas. 
 
 Si soy manager de un equipo y en la última época estoy observando mucha rotación entre mis colaboradores yo puedo decidir ocuparme y a la vez relativizar. 
 
 ¿Cómo? Relativizar 
tiene que ver con darle la importancia justa, poder pasar de ese tema a otros y no quedarnos enganchados ahí, y ser capaces de parar y coger “vista de pájaro”. 
 
 Algo totalmente compatible con buscar un plan de acción 
y ponernos manos a la obra. Quizá voy a hablar con las personas de mi equipo para ver cómo se sienten en los últimos meses, hacer una encuesta de clima, o empezar a analizar qué he podido cambiar en mi liderazgo en la última etapa. 
 
 Si no relativizo puedo tener pensamientos como estos: “es el fin de mi carrera”, “ya no valgo para nada”, “hace tiempo que ya no sé hacer las cosas bien…”. 
 
 Así que para mi iría más de la mano el no relativizar y el no hacer nada. Nos acercamos a la posición de víctima, donde reina el miedo, y donde éste nos lleva a la parálisis 
y al bloqueo. Preocupación 
en lugar de ocupación. 
 
 Por lo tanto, relativizar en una medida justa no nos tiene que llevar a la pasividad, sino al hacernos cargo desde un lugar menos pesado, y más liviano. 
 
 A veces utilizando el sentido del humor, otras la experiencia del pasado, y desde luego la confianza desde la cual podemos pasar a la acción y actuar. 
 
 ¿Te sirve esta distinción?
 
 Te leo, 
 

En una sociedad que va a mil por hora, en la cual todo es para ayer y donde parece que no hay tiempo para parar, la                                 empatía                               se vuelve una habilidad esencial en los líderes.                                                    Lejos de ser algo para “blanditos” es una fortaleza que marca la diferencia.                                                                          ¿Qué es liderar desde la empatía?                                                                         Un líder que acompaña, sostiene, cuida, inspira y escucha.                                    Escucha                                  con la mente y el corazón abierto, receptivo, con                                    confianza                                  , dejándose impregnar por el otro.                                                              Un líder que no avasalla y que no impone. Uno que sabe                                    conectar                                  con otros seres humanos, que conecta con lo que el otro siente y con el por qué lo siente.                                                                                                         ¿Y cuáles son los obstáculos para que los líderes desarrollen la empatía?                                                                         1. Asociar la                                    vulnerabilidad                                  con la debilidad. Asociar la autoridad y la imposición con la fortaleza.                                                              Desde el Coaching insistimos en que la vulnerabilidad es una gran fortaleza. Esa capacidad que tiene el líder de decir “no lo sé”, “necesito ayuda”, “voy a rodearme de los mejores”.                                                              2. La creencia de que “no hay                                    tiempo                                  para desarrollar a los equipos” y “solo tengo tiempo para hacer”.                                                              Los líderes tienen que tener tiempo para el desarrollo estratégico del negocio, para la mirada en el medio y en el largo plazo y también tiempo para conectar con sus equipos.                                                                                                         ¿Por qué la empatía es esencial para generar un equipo de alto rendimiento?                                                                         1. Aumenta el                                    compromiso                                  y la implicación de los colaboradores. Cuando líder conecta con los miembros del equipo, la conexión de cada uno de ellos con la misión se vuelve mucho más fuerte.                                                              2. Promueve                                    conversaciones                                                           auténticas                                  y genera                                    confianza                                  . Esto ayuda con la gestión del conflicto, al poder entender distintos puntos de vista y estar más abiertos a escucharse unos a otros.                                                              3. Ayuda a gestionar la                                    incertidumbre                                  y el                                    estrés                                  del día a día, ya que al sentirte visto, cuidado y escuchado hay más seguridad psicológica.                                                                                                         ¿Y qué recursos tenemos como líderes para fomentar la empatía?                                                                         - La técnica del                                    check in                                  . En el que todos los participantes tengan su espacio para compartir previo a una reunión.                               - Fomentar                                    espacios                                  pata                                    hablar y conectar desde lo personal                                  : un café especial los viernes o algún offsite más relajado.                               - Recursos para fortalecer la                                    escucha                                  : utilizar ecos -repetir palabras clave que ha dicho el interlocutor, verificaciones -“si te he entendido bien…”, indagar los hechos, las emociones y las necesidades -“¿cómo estás?, ¿qué ha pasado?, ¿cómo te sientes?, ¿qué necesitas?”.                               - Crear espacios para dar y recibir                                    Feedback                                                           auténtico                                  , feedback de mejorar y de fortalezas con ejemplos concretos y detallados, poniendo foco y sin dar rodeos.                                                              Todas las personas podemos elegir en nuestro día a día liderar desde la empatía poniendo nuestro granito de arena para una sociedad más                                    consciente                                  ,                                    responsable                                  y que pone a las personas en el centro.
 

Este mes hemos acompañado a varias empresas y particularmente a los departamentos de                         Diversidad, Equidad & Inclusión (DE&I)                        , y me gustó mucho observar que ya no estamos hablando del día de la mujer sino del mes de la mujer.                                                                    Efectivamente, en el marco del                                       Día Internacional de la Mujer celebrado el día 8 de Marzo                                     , llevamos unos pocos años ya aprovechando esta oportunidad para                         abrir un espacio de reflexión sobre el rol de la mujer en distintos ámbitos de la sociedad, especialmente en el mundo laboral                        .                                                                    En las últimas décadas, se han logrado                         avances significativos en equidad de género, pero aún persisten desafíos importantes                        . En esta entrada, exploramos datos clave sobre la participación femenina en el trabajo, la conciliación entre vida laboral y personal, los avances en igualdad de oportunidades y los retos que siguen pendientes.                                                                    Empecé por preguntarle a mi nuevo amigo ChatGPT unos                         datos sobre las Mujeres en el mundo laboral                        y me contestó que según el informe más reciente de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), l                         a tasa global de participación laboral de las mujeres es del 47%, en comparación con el 72% de los hombres                        . Aunque la brecha de género ha disminuido en algunos países, l                                       as mujeres siguen enfrentando barreras significativas para acceder a empleos de calidad y liderazgo                                     . Algunos datos relevantes:                                                                                                              La brecha salarial                            : las mujeres ganan, en promedio, un 20% menos que los hombres por el mismo trabajo.                                                       La representación en liderazgo                            : solo el 10% de los CEO de las empresas Fortune 500 son mujeres.                                                       El emprendimiento                            : a pesar de los desafíos, el 30% de los negocios en el mundo son liderados por mujeres y desde ellas Coach somos un ejemplo de ello                                                            Cuando hablamos con l@s participantes de nuestras charlas, uno de los retos más recurrente que mencionan es                                       la conciliación - el verdadero desafío persistente                                     . El equilibrio entre la vida laboral y personal sigue siendo una de las mayores dificultades para las mujeres trabajadoras. La OIT señala que                         las mujeres dedican, en promedio, tres veces más tiempo que los hombres al trabajo no remunerado                        , como el cuidado del hogar y la familia. Esto limita su desarrollo profesional y contribuye a la brecha de oportunidades.                                                                                 Laura Baena                        ,                          fundadora de                                                   Malasmadres                                     - con la que hablamos hace unos años sobre                                       "Yo No Renuncio: ¿Qué pasa con mi trayectoria profesional después de ser madre?"                                      - compartió este mismo mes                                       “lo más preocupante es que la mujer ha salido al mercado laboral a luchar en igualdad de oportunidades y derechos pero el hombre no ha entrado de igual manera en el hogar”                                                                                                                                                 A pesar de los desafíos, se han dado                         pasos importantes hacia la igualdad de género                        en el ámbito laboral:                                                                            Las normativas y leyes                            : muchos países han implementado leyes de equidad salarial y políticas de inclusión de género en empresas.                                                       La cultura empresarial:                             se ha promovido la diversidad en los equipos de trabajo a través de los departamentos de DE&I cada vez mas presente y con más presupuestos, lo que ha llevado a una mayor inclusión de mujeres en sectores tradicionalmente dominados por hombres, como la tecnología y la ciencia.                                                       El empoderamiento femenino:                             programas de mentoría, de coaching grupal e individual y de liderazgo femenino han impulsado la visibilidad y el desarrollo profesional de más mujeres en el mundo corporativo.                                                           Sobre este último punto, este mes, en varias ocasiones he podido intercambiar sobre                         el (auto-) Liderazgo femenino y el empoderamiento acompañando a grupos de mujeres y grupos mixtos                        .                                                                    Otro de los retos que más resaltan en el desarrollo de las mujeres en mundo laboral es el                                       “Perfeccionismo”                                     la filosofía que llamo del                                       “todo o nada”                                     y el lamentablemente famoso                                       “Síndrome del Impostor”                                     . Estos desafíos, bajo mis propias experiencias y observaciones,  impactan particularmente la autoconfianza y la comunicación asertiva.                                                                    Soy una eterna optimista y el hecho de que estemos hablando con grupos de mujeres y mixtos de estos temas, que estemos definiendo junt@s y posiblemente reconociéndonos en el síndrome del impostor, que estemos buscando junt@s las características claves para el liderazgo y el empoderamiento, me parece super positivo.                                                                    También es cierto que                                       medidas como el teletrabajo, la flexibilidad horaria y el acceso a bajas parentales equitativas han ayudado a mejorar la situación en algunos sectores                                     . Sin embargo, aún queda un laaaaargo camino por recorrer para lograr una distribución más equitativa de las responsabilidades familiares y domésticas.                                       A pesar del progreso, aún existen desafíos clave para alcanzar una equidad real en el mundo laboral:                                                                                                     Romper el techo de cristal:                            la presencia de mujeres en altos cargos sigue siendo limitada.                                                       Combatir la discriminación y el acoso laboral:                            muchas mujeres continúan enfrentando ambientes hostiles en sus lugares de trabajo.                                                       Fomentar la corresponsabilidad                            : es crucial promover políticas que incentiven a los hombres a asumir un rol más activo en el hogar y la crianza de los hijos.                                                           El Mes de la Mujer es                                       una oportunidad para reconocer los avances logrados en materia de equidad de género, pero también para reflexionar sobre los retos que aún persisten.                                     Es fundamental seguir promoviendo políticas inclusivas y fomentar un cambio cultural que permita a las mujeres desarrollar todo su potencial en el ámbito laboral. Solo a través de un esfuerzo conjunto entre gobiernos, empresas y la sociedad en su conjunto podremos alcanzar una verdadera igualdad de oportunidades.                         Cada granito de arena cuenta, ¿Cuál es el tuyo?
 

Photo credit: Laura Adai.                                                              Ya estamos                       cerrando el año                      añadimos el “y si no volvemos a hablar, ¡felices fiestas!” al final de nuestros emails y ¡                       nos preparamos para celebrar este cierre del 2024 y comienzo del nuevo año!                                                                                                Para ello, hay                                    una herramienta lúdica, creativa y muy visual llamado el                           Vision Board                                               que nos puede ayudar mucho en                       conseguir nuestros objetivos tanto personales como profesionales                      .                                                                                       ¿Qué es un                           Vision Board                          ?                                                                  Es una técnica que nos permite plasmar nuestras metas para el nuevo año de manera visual                      para que no se queden en el olvido.                       ¿Os suenan esos propósitos de año nuevo que escribimos en alguna libreta física o virtual y que se diluyen tanto que nos olvidamos de ellos a los pocos días o semanas?                                                                                                                         Con el Vision Board,                                    al ser visual - e idealmente colgado en un lugar visible - es un recordatorio ideal para guardar esas metas en tu “                           top of mind                          ”                                  , es decir e                       n nuestro consciente, enfocar nuestra energía en ellas y mantener la motivación hacia lo que realmente deseas para este año que se abre                      .                               Esta técnica                       va mucho más allá de una tarde entretenida de manualidades recortando y pegando imágenes de nuestros magazines favoritos y sacando nuestra vena artística                      ;                                    es un verdadero viaje de reflexión, autoconocimiento y manifestación de nuestros deseos.                                                                                                              ¿Para qué crear un                           Vision Board                          ?                                                      Todos tenemos sueños, y realmente se pueden quedar en esto, algo que anhelamos y que se queda en “las nubes”, en nuestra imaginación, en algo deseado pero irreal e intangible.                                                                          Tener una visión es transformar esos sueños en realidad y para ello necesitamos identificarlos, nombrarlos y pasar a la acción, por muy pequeños que sean estos pasos.                      Con el                       Vision Board                      , podremos                                    visualizar estos sueños convertidos en visiones y eso nos ayudará a hacerles reales                                  .                                                                                       ¿Cómo crear un                           Vision Board                          ?                                                      Comparto algunos pasos sencillos para ayudarte a crear tu                       Vision Board                      , pero                                    recuerda que es un proceso creative por lo que deja riendas sueltas a tu imaginación y creatividad, no te límites a estos pasos                                  y si sientes que algo diferente te podría ayudar y motivar para hacer reales tus metas, ¡adelante, no te cortes!                               Se pueden usar                       imágenes, palabras, mantras, citaciones inspiradoras, cualquier cosa que te ayudará a empoderarte hacia tus metas y aspiraciones para este nuevo año                      .                                                                                       1. Identifica y describe claramente tus metas y aspiraciones                                                                                                                                     Esto                       es la base del                         Vision Board                                  .                       Dedícale un tiempo cualitativo.                                                                                                ¿Tienes claro tus metas?                                        : apuntalas todas en una lista.                                                                  ¿Te cuesta identificar tus metas?                                        : te puede ayudar empezar unas semanas antes con un diario para crear una lluvia de ideas que poco a poco podrás organizar, priorizar y transformar en metas las que te parecerán más relevantes y esenciales para ti                                                                               2. Prepara todo el material necesario                                                                                                                                                                                           Primero la base:                                        el                           Board                          . Puede ser un tablero de corcho, de madera, cartulina de papel, de cartón, cartón-pluma o incluso un lienzo…lo que te sea más cómodo y accesible.                                                                  Luego el material que necesitarás para crear                                        : imágenes imprimidas o de alguna revista, periódicos, fotos, postales, dibujos y también rotuladores, post-its, pintura, tijeras, pegamento etc.                                                                  El                         Vision Board                        también puede ser digital                      a través de alguna herramienta como Canva, Asana etc. En este caso, te animo a que                       lo imprimas y lo pongas en un lugar visible en tu día a día                      .                               En la medida de lo posible,                                    mi recomendación es que sea un tablero físico pues además de volver a conectar con tu niña interior, al usar más sentidos, te permite activar más zonas de tu cerebro que te ayudaran a memorizarlo.                                                                                                              3. Busca un lugar tranquilo y un hueco amplio en tu agenda                                                                                     Necesitas                       tiempo contigo misma                      para no sentirte presionada y también                       un lugar libre de interrupciones y distracciones                      para poder entrar en un                       estado de Flow                      del que ya os hablé en este                                    artículo                                                           de Vogue Business                                                                                                              4. Selecciona y organiza tus metas para crea tu                           Vision Board                                                                                                  Esa es                       la parte molona                      de darle forma a tu                                    Vision Board                                  donde podrás                                    jugar con todo el material a tu disposición para posicionarlo en tu tablero hasta que encuentres LA visión con la que te identificas                                  .                                           En este proceso es completamente normal que de repente surjan cambios                      ; una idea que te parecía primordial pierda su sentido o al revés, alguna idea que habías descartado de repente cobre mucho más protagonismo y merezca su lugar en tu                       Vision Board                      .                                    Déjate fluir, escúchate, sigue tu intuición sin juicios – tú tienes la respuesta correcta en este momento.                                  El hecho de que sea una técnica visual es precisamente lo que nos permite:                       dar los últimos toques y retoques para que realmente la foto completa tenga sentido                      .                                                                                       5. Cuelga tu Vision Board en un lugar visible en tu día a día.                                                                                     Tu creación será                       una gran fuente de inspiración…si y solo si lo tienes a mano y lo puedas visualizar en tu día a día                      . Así que ¡no seas tímida, no te cortes, y asegúrate de poder verlo cada día! Recuerda que, si lo has creado de manera digital, imprímelo o déjalo como fondo de pantalla de tu ordenador para que lo puedas recordar cada día.                                                                                       6. ¡Pasa a la acción!                                                                  Como dice Joel A. Barker:                                       "La visión sin acción es un sueño. La acción sin visión es simplemente pasar el tiempo. La acción con una visión puede cambiar el mundo."                                                                                                                                                                                                      7. Actualiza tu                           Vision Board                                                                                                  De vez en cuando,                                    dale una mirada desde la curiosidad: ¿Y si… añado, modifico, quito, reordeno mi Vision Board para ayudarme a alcanzar mis metas y aspiraciones?                                  12 meses son muchos días en los que las cosas pueden cambiar, nuevas oportunidades pueden surgir, etc.                       Permítete la flexibilidad para retocarlo, al menos cada 3 meses, y regálate este momento de calidad y de curiosidad contigo misma                      ....                                    ¡¡Y aprovecha para celebrar todo lo que ya has conseguido!!                                                                                                              ¿Te animas?                                                                               L.
 

Es un concepto que traemos en todo lo que hacemos desde ellas Coach tras tratar una temática o situación concreta, preguntamos                                    ¿cuáles son los pequeños cambios que quieres llevar a cabo?                                  Empezar con pequeños pasos, de un                       nivel de intensidad y dificultad razonables es clave                      para no procrastinar y empezar desde ya y no desmotivarnos y abandonar en el camino.                                          Siempre animamos a que estos baby steps sean lo más                                    SMART                                   posible.                                                              Me gusta siempre ponerlo desde la perspectiva de las                                    4 fases del aprendizaje                                  de M. BROADWELL que explique en este                                    artículo                                   y que recuerdo por aquí:                                                              •                       Incompetente inconsciente                      : no soy consciente de mi “incompetencia”, es decir,  no sé que no sé.                                                              •                       Incompetente consciente                      : ya me he dado cuenta de que no sé por lo que me pregunto qué es lo que quiero hacer con esta nueva información: lo quiero cambiar o me compensa más seguir como estaba. Si decido cambiar algo, entonces pongo en marcha un plan de acción que me lleva al siguiente escalón:                                                              •                       Competente consciente                      : y poco a poco, a base de baby steps, poniendo atención, siguiendo conscientemente un plan, de acción probando cosas nuevas y ajustando cuando no me funciona algún experimento (¡con auto compasión siempre!), empiezo a ser competente. Poco a poco, creo un nuevo hábito, una nueva competencia.                                                              •                       Competente inconsciente                      : cuando ya hemos implementado el hábito hasta tal punto que lo tenemos literalmente incorporado (incorporado viene de                       in corpore                      , dentro del cuerpo), y no necesitamos pensarlo o planificarlo conscientemente. Esta nueva competencia, este nuevo hábito, se convierte una rutina.                                                              Podemos situar estos babysteps, estos pequeños cambios en el escalón 3, el escalón del “competente consciente” – y como dice el gran                                    Einstein                                    “                       es una locura seguir haciendo lo mismo y querer obtener resultados diferentes                      ” así que nos podemos                                    proponer explorar, probar, testar nuevas formas de hacer, ver o “juzgar” las cosas                                  . Suena fácil, pero requiere un esfuerzo consciente hasta convertirlo en un hábito, es decir llegar al escalón 4 de Broadwell, en la “competencia inconsciente”.                                                              Estamos acabando el mes de octubre, el mes que para mí significa la verdadera vuelta a la “normalidad”, la vuelta a cierta estabilidad tras el verano, la vuelta al cole y al trabajo. Es                       un mes perfecto para establecer ciertos cambios, elegir conscientemente algunos baby steps SMART para alcanzar mis metas profesionales y personales                      .                                                              Yo me di cuenta de que tengo                       una gran tendencia a seguir el ritmo frenético de nuestra sociedad VUCA                      (Volátil, llena de Incertidumbre, Compleja y Ambigua por sus siglas en ingles), una sociedad aceleradísima…y                       me veo inmersa en su flujo infinito de “to do´s” por inercia                      . Uno de mis objetivos                                    es poner consciencia en ello y acercarme al “slow living” aunque solo sea de vez en cuando y poder alternar entre el modo fast y slow                                  .                                                              Por ejemplo, he dejado el primer café de la mañana…ya, claro, para muchos esto no significará nada espectacular. ¡                       Para mi marca un antes y un después                      entre una mañana a ritmo “biológico”, un despertar mental y físico muuuucho más lento y una mañana que empieza a ritmo “cafeinado”! Llevo casi un mes, y hasta hoy echo algo de menos el subidón que me daba mi primera taza de café. Era la primera cosa que ofrecía a mi cuerpo tras entre 6 y 9 horas de descanso, ¡iba directa al oro negro y mágico que me ponía en marcha y a tope para estar en el hacer, hacer y hacer un poco más! Y a la vez, veo también lo antinatural que resultaba este chute de cafeína provocando cierto nerviosismo instantáneo que empecé a notar en la aceleración de los latidos de mi corazón pocos días antes de pausar este hábito.                                                              Tambien, me he propuesto                       poner mucha atención en mi reactividad                      , es un verdadero esfuerzo de consciencia proponerme ver dónde puedo responder en vez de reaccionar. Como dice                                    Viktor Frankl                                  ,                       la diferencia entre reaccionar y responder es un espacio de tiempo “en este espacio tenemos el poder de decidir nuestra respuesta.                         En nuestra respuesta se encuentra nuestro crecimiento y nuestra libertad.                        ”                      …y por esto tengo post-its, alarmas en el móvil, una cruz dibujada en mi mano izquierda como recordatorios para                       parar y usar esta libertad de la que habla Frankl                                  y seguir creciendo como persona, madre, esposa, amiga…                                                                         Y por último, me di cuenta de lo que me decía                       mi voz interna                      (¡a veces hasta me lo gritaba!) llena de juicio y de creencia limitante “                       si no estas en el hacer, no estas siendo productivida, estas haciéndote la vaga, venga muévete                      ”.                                Tengo otro post-it que                       me recuerda la necesidad de alternar entre el hacer y parar                      .                                    Parar desde el disfrute                                  , el disfrute de no hacer NADA sin juicio para seguir en el camino de la gestión de la energía como comentaba en este articulo (https://www.ellascoach.com/legitimar-la-pausa-regulacion-de-la-energia).                                                                                       Y tú, ¿cómo has empezado el otoño? ¡¿De qué hojitas te vas a desprender para seguir creciendo?!
 

Una de las cosas que más trabajo últimamente en sesiones individuales es                     “aprender a decir NO”.                               Cuanto escuchamos (¡y decimos!) esta frase y                       qué difícil es aplicarla de verdad, siendo auténticas con nosotras mismas                      , y sin herir a la otra persona,                       sin ser o temer aparentar ser una persona egoísta                      , borde, “poca compañera de sus compañeros” ….                                                              Decidir si quiero decir que sí o que no sabiendo que en ambos casos habrá costes y beneficios,                                    es ante todo ser honesta y auténtica con una misma                        .                                                                         Cuantas veces,                       me he oído decir SÍ por inercia, por automatismo, casi como un reflejo:                      “sin problema”, “claro, mándamelo, me encargo yo”, “por supuesto, para ti siempre tengo un rato” …                       y luego arrepentirme                      por no tener tiempo para lo mío                       o enfadarme                      por tener que quedarme hasta las mil para poder acabar con mis propios compromisos y prioridades 😊                       ¿Os suena?                                                                                                  Aprender a decir NO, es un largo camino                                  , desde la                       autoconsciencia                      y la                       voluntad de cambiar                      , desde el                       propósito                      y                       disfrute                      de serme                       leal                      , de estar                       conectada                                  conmigo misma                      , de saber                       escuchar y entenderme                      . Un largo camino que cada una de nosotras puede comenzar a su ritmo, según su punto de partida.                                                              Durante mucho tiempo,                                    asociaba el decir que no al egoísmo                                  . Si buscamos la definición de esta palabra “fea”, la RAE nos dice                                    “inmoderado y excesivo amor a sí mismo, que hace atender desmedidamente al propio interés, sin cuidarse del de los demás”                                                                                                                          Culturalmente, no está bien visto decir NO                                  ,                       “hay que ayudar al prójimo”                      ,ser solidarias y generosas. Sin embargo, si nos fijamos en la definición del egoísmo con                       cierta                                  distancia emocional                      y                       cierto nivel de objetividad                      , podemos apreciar el abismo entre decir no y ese “                       excesivo amor a sí mismo                      ” y esa necesidad de “                       atender desmedidamente al propio interés                      ”.                       ¡Una cosa no implica necesariamente la otra!                                                                         Hace unos años, en                                    el diccionario de ellasCoach                                   definía la asertividad como                       “la habilidad de una persona a expresar su opinión, defender sus derechos de forma directa y respetuosa, sin intención de herir al otro”                                                                         Para mí,                       ubicarme en la escala de la asertividad                      fue un ejercicio y                                    una herramienta de una grandísima ayuda                                  y la uso muchísimo en mis sesiones de coaching.                                                              En esta escala                       el equilibrio está en el medio, en la asertividad                      ; punto en el cual                                    conseguimos escucharnos y comunicarnos con respeto y empatía para defender nuestras opiniones, trasladar nuestras expectativas o dar un feedback                                  ,                                    y estamos abiertas al punto de vista del otro                                  :                       la comunicación fluye                      .                                                              Sin embargo,                       me atrevería decir que la asertividad no es “natural”                      y que                                    solemos estar en uno de los polos opuestos,                                                      - en la                                    pasividad                                  : digo que sí aun pensando no, o simplemente me callo, no opino, me ajusto a lo que dice la mayoría.                       No hay comunicación por mi parte                      y esto puede provocar resentimiento y enfado en mi.                               - en la                                    agresividad                                  : hablo con vehemencia, impongo mi punto de vista o me cierro al punto de vista del otro.                       Bloqueo la comunicación                      pues o bien se hace unilateral o provoca agresividad en respuesta por parte del interlocutor.                                                                                       Todos tenemos una preferencia y adoptaremos naturalmente más una respuesta de nivel 10 (agresividad) o de un nivel un 0 (pasividad)                                  . Por lo tanto, la primera parte del ejercicio es ubicarnos en esta escala, ¡puede ser diferente según los entornos en los que me muevo (familia, trabajo, amigos, etc.) o no!                                                              Digo un ejercicio porque,                       para mí, realmente supuso (¡y sigue suponiendo en algunos contextos!) un esfuerzo, a veces lo consigo y otras no                      . Y está muy bien así, en todos los casos,                                    hoy puedo verlo, pararme y reflexionar sobre lo que me ha permitido ser asertiva o lo que me lo ha impedido                                  para así, poco a poco, poder entenderme y conocerme mejor preguntándome: ¿en qué situaciones me cuesta más? ¿Es más, con la familia? ¿En el trabajo? ¿Con los amigos? ¿Qué siento? ¿Qué me digo?                       ¿Y qué es lo que temo?                                                                         A esta última pregunta,                       hablando con mis coachees                      , lo que más suele haber debajo de esta incapacidad a decir NO, es que nuestros interlocutores:                                                        piensen que soy una                           egoísta                                                  se                           ofendan                                                               no vuelvan a                           contar conmigo                                                  se dañe la                           relación                                                  piensen que no soy                           capaz                                                                                            Y si vamos un paso más allá, en la profundidad,                                  siendo seres sociales con necesidad de pertenencia, lo que suele acabar saliendo es que                                    tememos que dejen de apreciarnos, de valorarnos y de querernos                                  .                                                              Al principio, para mí, estos motivos me eran completamente ajenos: “hombre, no, yo lo hago para ayudar, no hay que darles tantas vueltas a las cosas”. Poco a poco, haciendo el ejercicio en los diferentes contextos de mi vida, sí que había algo de estas aprensiones.                                                              Gracias a un gran maestro mío,                       hoy a mí me gusta verlo como dos caras de la misma moneda: SÍ / NO                      .                                                                                     Si digo que sí a la otra persona, me digo que no a mí misma                                        : ¿a qué renuncio?, ¿Qué coste tiene?, ¿Me compensa asumir este coste?                                                                                                            Si digo que no a la otra persona, me digo que sí a mí misma                                        : ¿en qué me beneficia?, ¿Qué coste tiene para la otra persona?, ¿Y para nuestra relación?, ¿Me compensa? Puedo/quiero compensárselo a la otra persona con un "sí, pero ahora no.."?                                                                               ¿Te atreves a probar el ejercicio?                                                                             Te invito a reflexionar sobre ello y a ubicarte en la escala de la asertividad                      😊
 














